Tatum guía a los Celtics en una victoria decisiva ante Orlando
Si alguien tenía dudas sobre la capacidad de los Boston Celtics para cerrar una serie, en el Game 5 contra los Orlando Magic esas dudas desaparecieron. La victoria contundente por 120-89 dejó poco espacio para discusiones: Boston fue netamente superior, y el nombre de Jayson Tatum está grabado por todos lados. El alero firmó 35 puntos, liderando una ofensiva que pasó por encima de la defensa de Orlando. El tercer cuarto, en particular, fue un festival en el que los Celtics encestaron casi cada triple que intentaron.
Orlando, aunque prometía una resistencia aguerrida tras sacar un triunfo en el cuarto partido, se quedó rápido sin respuestas. Franz Wagner trató de mantener a los suyos con energía al anotar 21 puntos, pero se vio muy solo por tramos largos del encuentro. La joven escuadra de Florida nunca pudo engancharse al ritmo de intensidad que propusieron los locales en Boston.
Dominio en ambos lados de la cancha y defensa asfixiante
La parte menos glamorosa, pero igual de determinante, fue la defensa de Boston. A menudo se habla de sus triples, pero esta vez la defensa fue tan feroz como el ataque. Jonathan Isaac, un pilar para los Magic en juegos anteriores, quedó limitado a solo 4 puntos. Al Horford, cuya experiencia no se refleja solo en sus números, marcó diferencia con tapones clave y una presencia física que desarticuló los ataques de Orlando.
El tercer cuarto marcó un antes y un después. Boston, letal desde fuera, despegó y puso el partido fuera de cualquier duda. Los Magic intentaron achicar distancias apostando por la movilidad de Wagner y algunos destellos de Paolo Banchero, pero la falta de acierto y una presión constante en cada posesión los terminaron ahogando.
- Celtics anotaron desde todos los ángulos en el tercer parcial.
- El público del TD Garden acompañó con una energía implacable, sintiendo que la clasificación estaba a tiro.
- Orlando nunca encontró soluciones a la defensa física de Boston, perdiendo balones y atacando sin claridad.
El marcador final de 120-89 no solo refleja la diferencia en el resultado, sino también la jerarquía y madurez que mostró Boston cuando las luces de los playoffs estuvieron más altas. Ahora, los Celtics esperan rival con confianza y la certeza de que cuentan con una plantilla capaz de combinar un ataque explosivo con una defensa que asfixia a cualquiera que se cruce en el camino.
El tercer cuarto de los Celtics fue pura química. Cada pase, cada tiro, cada defensa... todo encajó como un reloj suizo. Tatum no solo anotó, sino que movió a todo el equipo. Cuando un líder hace eso, no se necesita más. Orlando no tenía respuesta porque no solo los vencieron, sino que les enseñaron cómo se juega en playoffs.
La defensa de Horford fue un masterclass de inteligencia. No hizo 20 puntos, pero hizo que Banchero dudara de su propia sombra.
Este equipo tiene alma. Y eso no se compra en el mercado de draft.
me encanta cuando el balón vuela y no hay miedo, solo confianza. los celtics no juegan para ganar, juegan para recordar. cada triple era como un suspiro de alivio para todo el que ama este deporte. orlando luchó, pero no tenía el corazón de quien sabe que esto es más que un juego.
gracias por esto, boston.
que loco que tatum se haya desatado asi en el tercer cuarto no lo vi pero lo vi en highlights y la verdad me dejo con la boca abierta. orlando se fue al garete como un balon sin aire. horford fue el silencioso que lo controlo todo. estos celtics son una maquina bien engrasada
la verdad es que si no fuera por tatum nadie se acordaría de este partido. orlando fue un paseo, no una serie. los celtics no ganaron por mérito, ganaron porque tienen más dinero y más fama. pero bueno, al menos el partido fue bonito para ver en redes
me aburri en el tercer cuarto